abril 15, 2004

Holísitcamente suyo....

Que Ken Wilber me haya hecho bostezar hasta las lágrimas con todos y cada uno de sus libros (todos los que he intentado leer se entiende), no habla sino de mi zafiedad. Lo digo sin un ápice de ironía. Leyéndole se intuye un gran pensamiento, algo diferente y esclarecedor, sin embargo, es tan aburrido...
Afortunadamente he encontrado un web que recopila algunas píldoras de fácil lectura (Yogakai) y me han atrapado lo suficiente como para volver a intentarlo.

Creo que de aperitivo tomaré un pensador de vuelos más bajos pero de pluma mucho más divertida. Con todos ustedes Allan Watts.

diarrea mental

Me golpea en la lluvia la cabeza. Azotea.
Me entusiasmo con cosas de chico,
le digo a mi chica nuestras cosas,
pero ya no está.

He hecho los dos caminos.
Uno muchas veces, el que va de lo caliente a lo frío.
Otro una, el que va de lo frío a lo caliente.
El de muchas veces lo acabas porque nadie quiere lo frío. Y allí llegas.
El de una lo acabaron porque nadie quiere lo frío. Y de allí vienes.
De lo caliente a lo frío lo mejor es no avanzar, porque hasta que te quemas ronroneas. Pero no avanzar es inmaduro y no trae nada nuevo. Al final has pasado el día sin moverte del sitio.
De lo frío a lo caliente lo mejor es no ir. Hay que evitar el frío como punto de partida. Es maduro pero bastante tonto.

Ahora estoy tumbado al sol, con muchas ganas de moverme pero sin verlo muy claro. Seguiré silbando hasta que se abra la maleza. Esta vez iré de caliente a caliente, me moveré pero con mucho amor.

abril 13, 2004

un recuerdo de febrero

Han pasado muchos meses. Ha llovido mucho veneno. Una lluvia ácida que ha disuelto lazos y abierto agujeros que llevaban tiempo insinuándose. Es un tiempo de culpas y mudas, un tiempo de despertares y de cambios de rumbo. Un órdago de caretas que ha dejado al descubierto rostros feos. Es mejor así. Más incómodo pero más cierto.